Hace varios años, cuando simplifiqué lo necesario para afrontar y gestionar conflictos, vino a mi mente una imagen clara del vuelo de las libélulas, volando libres y fluidamente a través de los cambios del viento. Investigué a fondo sobre su biología y movimiento, y concluí que representan la más bella analogía en lo que se refiere a GESTIÓN DE CONFLICTOS. 

Si contemplas su vuelo verás que son danzarinas y estrategas rápidas y eficientes, con movimientos impredecibles que siguen los rayos del sol, en completa armonía con su entorno, lo cual les permite adaptarse a los cambios emergentes. Puedes verlas volar en todas las direcciones, incluso hacia atrás, con un movimiento parecido al movimiento de remo, primero empujan hacia atrás y hacia abajo, y luego cortan hacia arriba y hacia delante. Sus alas transparentes aparentan ser bastante frágiles, pero en realidad son muy fuertes, ya que pueden volar con un viento intenso en contra e incluso bajo la lluvia. 

Este movimiento aplicado al conflicto, lo lograrás practicando mi MÉTODO GUC (Gestión Unificada de Conflictos).  A través de sus 5 pasos simples y eficientes, podrás aceptar el conflicto, sentirlo y analizarlo de una manera unificada, descubrir y gestionar tus patrones negativos relacionados a el, para que emerja dentro de ti, de una forma muy natural tu movimiento auténtico y estratégico, con el cual podrás comunicarte empáticamente y negociar conscientemente con todas las diferencia.

Las libélulas tienen enormes ojos con más de 30.000 lentes, que les permiten tener una visión de 360 grados: de la mitad hacia arriba adaptados para ver las formas abstractas del cielo y de la mitad hacia abajo, para ver las formas concretas de la tierra, con lo cual más que ver les permite sentir el movimiento en cualquier lugar a su alrededor.   Cuando armonizamos nuestra frecuencia y sostenemos la calma en el conflicto, podemos conectar profundamente con las diferencias y semejanzas que tenemos con los demás,  y desde esa consciencia de conexión, de una manera simple y natural, elegir amarnos, y desde allí tomar decisiones amorosas y asertivas hacia los demás.

Para danzar estratégicamente tu conflicto, puedes iniciar:

1. Analizando de una forma lógica tu conflicto.

2. Dibujando tu conflicto, conectando con tu sentir y permitiendo que eso que sientes se exprese.

3. Comparando tu análisis con tu dibujo y anotando tus descubrimientos.

4. Preguntándote ¿Cuáles DECISIONES me llevarán a transitar este conflicto en particular… DEL CONFLICTO AL AMOR?

Cada vez que veo libélulas, ellas me conectan con la alegría y me recuerdan que sí es posible estar presente en el conflicto desde un pensamiento unificado, intuitivo y estratégico, el cual nos permitirá seguir danzando la vida y el conflicto a través de sus múltiples cambios, de  una forma transparente, desde el amor y la negociación integral!

La invitación final es a que te entrenes en este maravilloso arte de una forma integral, y dinamices tu vida desde la empatía poderosa, la alegría y el amor. Haz click abajo para iniciar tu proceso de transformación a través de este mágico movimiento.